viernes, 13 de septiembre de 2013

Noche mágica

Hoy sales de fiesta con tus amigas y la verdad es que tienes muchas ganas, hace tiempo que no las ves y te apetece bailar cómo si nadie estuviera mirando. Así que te arreglas, no demasiado, y te diriges al punto de encuentro.

Durante la cena no paráis de contaros todo tipo de cotilleos del verano, risas y más risas. Vais a tomar algo y finalmente os dirigís a la discoteca. Ya has ido varias veces y te gusta bastante, seguro que esta noche valdrá la pena, o eso esperas. 

Sólo aterrizar en la pista empezáis a bailar dándolo todo. Suena la canción "Wonderwall" de Oasis, toca descansar un poco después de tanto meneo. Aprovechando el momento, un chico se acerca a una de tus amigas y empieza a hablar con ella, "es mono", piensas. Miras a su lado y ves al que parece su amigo, “dios, ¿que guapo, no?”. Te mira y te sonríe. “¿Me está mirando a mi? No es posible, ay madre.” Se acerca a vuestro grupo, y te empiezas a poner nerviosa. 

-¡Hola! Veo que mi amigo está con vuestra amiga. ¿Cómo os llamáis?- dice mientras se te queda mirando-. 
-Yo África, ella es Abril y ella Marta. Y tu, cómo te llamas? 
-¡Yo soy Álex! Y perdona si me confundo con los nombres, tengo un poco de memoria de pez. 

¿Eres tú o has sentido un flechazo? Nunca te había pasado, no así de fuerte. Él no deja de mirarte y eso te intimida. Se pone a tu lado y empieza a preguntarte cosas. Habláis y habláis durante lo que parecen horas. La música hace que tengáis que acercaros mucho cada vez que queréis decir algo, notar su respiración en tu oreja hace estremecerte. Tenéis tantas cosas en común que no acabas de creértelo, no puede ser tan perfecto. 

-Oye, ¿qué te parece si nos apartamos un poco de aquí? Me pareces una chica muy interesante y me encantaría conocerte un poco más. 

Aceptas encantada y os alejáis hacia un sitio más tranquilo. No paráis de hablar, la conexión que hay entre ambos es evidente. De repente os quedáis callados, él te está mirando a los labios, tú no puedes evitar hacer lo mismo, y surge, os besáis. Un beso tierno pero muy sexual, uno seguido de muchos. De repente, te mira fijamente, eso te pone nerviosa así que acabas tapándole los ojos con tus manos. 

-¡Eh! No hagas eso. ¿Sabes? Me tienes hechizado. No sé que me pasa, sólo sé que ahora mismo me pasaría toda la noche aquí a tu lado, en serio, eres preciosa. 
-Sí anda...no digas tonterías.
-Calla y bésame, no estropees la magia. 

Besos y más besos. Hacía tiempo que no sentías esa chispa al estar con alguien. ¿Habrá sentido él lo mismo? Es momento de volver a casa y llega la despedida. Él te pide tu número y promete hablarte para veros pronto. Os decís adiós con un bonito beso . No acabas de creer lo que ha ocurrido, ésto no te puede haberte pasado a ti. ¿Es un sueño y vas a despertar de repente, o qué pasa? 

Llegas a casa y te tumbas en la cama. Te cuesta dormirte porque no paras de pensar en él: sus ojos, su sonrisa, sus besos, sus carícias... Miras el móvil para saber que hora es y ves que tienes un mensaje nuevo de un número que no conoces. ¡Dios! ¿Será él? 

"Espero que hayas llegado bien a casa, yo ya estoy sano y salvo. Me ha encantado estar contigo esta noche. Besos de buenas noches. Álex" 

No puedes evitar sonreír. No sabes cómo acabará todo esto, pero tienes claro que algo especial ha surgido esta noche y no piensas dejarlo escapar, no esta vez.


.~África~.

2 comentarios:

  1. ¡Es precioso!

    Espero que no quede ahí. Parece un buen chico.

    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Muchas gracias!

      Viniendo de ti es todo un halago, ¡me encanta tu blog!

      Besos :)

      Eliminar